Recientemente, se me pidió una copia detallada del programa pedagógico de la Escuela de Circo Carampa, alguien que imaginaba que al tener este documento, y replicarlo hora por hora, podría construir un programa similar. Tras un rechazo instintivo a esta demanda, me puse a pensar, por una parte, que yo no podía acceder por razones, digamos, éticos, y por otra parte, porque, salvadas estas dudas morales, seguía sin ser una demanda razonable.
Por una parte, en cualquier escuela, este proyecto escrito no pertenece a su autor, si no a un sinfín de profesores, años, circunstancias, experiencias, alumnos, pruebas, y modificaciones. Pertenece, sin duda, a la escuela, pero también a muchas personas que con el tiempo han contribuido a ello y que tienen cierto “derecho” sobre sus contenidos. En definitivo, no era mío, como director, para regalar.
Pero mas allá que ésta consideración de pertenencia, en el momento de transcribirse, un proyecto pedagógico es un compendio de aciertos y carencias, que con el tiempo se siguen trabajando. A su manera, es como una tortilla de patatas.
El Plan Pedagógico y la Tortilla Española*
Una tortilla española, también conocido como tortilla de patatas, tiene huevos batidos, patatas peladas, cortadas, y fritas, y se prepara en un sartén. Estas son características comunes de todas las tortillas de patatas. Preparación física, acrobacia, técnicas de circo, juego interpretativo. Hasta aquí, son características comunes de todos los programas de las escuelas de circo.
Pero a partir de aquí, las variaciones son infinitas:
El recipiente (el espacio)- si el sartén es más pequeño, te sale una tortilla más gruesa… También, según las características del espacio donde se realiza el programa, saldrá de una manera u otra. Hay altura, hay colchonetas, hay foso, hace frío por las mañanas…?
El método- como se cortan las patatas, si en lonchas gruesas o finas, si en trozos, como los fríes-, para que estén muy blandas, o un poco masticosas. Cada docente también tiene una metodología, y decir “8 horas semanales de acrobacia”, puede suponer una intensidad de contenido muy distinto, según quien y de que manera se imparten estas 8 horas.
Los contenidos- hay cebolla o no hay cebolla, hay algún otro ingrediente que se añada a la mezcla, que aunque insignificante por cantidad, puede afectar mucho el sabor final? Las líneas generales de los programas de las distintas escuelas tienen mucho en común, pero lo que les distingue, y todos son distintos, son los detalles de su enfoque.
El Estilo de cada cocinero- hay quienes le gustan mas secos, o mas líquidos, mas salados o con hierbas… Es decir, todas son tortillas de patatas, pero no hay dos que sean iguales, y como te sale la tuya, dependerá de tus factores…
No se pueden copiar, las personas, las circunstancias, los alumnos, espacios, conocimientos actuales de cada uno. El programa de una escuela es el resultado de una cocción compleja- es un trabajo colectivo, y aun para el mismo equipo, es diferente cada vez, según los alumnos, el calendario, una multitud de factores…
Por mucho que se anota por escrito en un momento dado, ni el día siguiente será lo mismo. Varía constantemente. Y sin embargo, por muy similares que sean los unos a los otros, este proyecto incluye detalles que definen la escuela, y que le dan el carácter que lo hace único y distinto de cualquier otra.
No es posible sustituir un conocimiento y una química acumulada entre un equipo de docentes, un saber y una experiencia que les habilita para tomar las pequeñas decisiones que año tras año, y semana tras semana se toman en beneficio de este planteamiento vivo que es el plan de estudios-, no es posible sustituir todo esto por un documento.
Sin las personas, la capacidad de comunicación que existe entre ellos, sus aprendizajes ante intentos de avanzar según los alumnos y las realidades circunstanciales de su proyecto, no hay proyecto pedagógico.
Carampa ofrece un programa que incluye horas en tres grandes áreas- Acrobacia de base y Preparación Física, las distintas Técnicas de Circo (técnicas aéreas, técnicas de equilibrio, especialidades acrobáticos, manipulación de objetos), y los Artes Interpretativos (principalmente Interpretación y Danza, algo de pantomima, clown, mascara, etc.)- que están repartidos en proporciones mas o menos iguales- 30/30/30%. El 10% restante, son los 3-4 horas semanales (de un total de 35) de cursos teóricos, que abarca desde la anatomía hasta la orientación laboral, pasando por maquillaje, luces, primeros auxilios, prevención de riesgos, y una docena de temas mas, repartidas en módulos de 6 a 30 horas, sobre los dos años del programa.
Cada uno mezcla los ingredientes según sus gustos, y por mucho que al final, todas sean tortillas españolas, la tuya no será como la mía, ni ha de serlo. Y para aprender a hacerlo a tu gusto, hay que meterse en la cocina. No hay receta que valga.
Donald B. Lehn
Director, E.C. Carampa
*La tortilla española no tiene nada que ver con la tortilla mexicana. Ésta última es una masa de harina de trigo o maíz aplastada y secada, dentro de la cual se introduce otros ingredientes en una especie de rollo. La tortilla española es mas bien un grueso omelet de huevos, con patatas fritas de relleno (ver imagen).
Texto publicado na: Revista de circo y teatro de calle – El Ambidextro num 50, de Mayo 2010 – elambidextrodigital.blogspot.com